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jueves, 10 de noviembre de 2011

Carlos Slim Helú.

La familia slim
Nació el 28 de enero de 1940 en Ciudad de México. Miembro de una familia de tercera generación de migrantes libaneses que llegaron a México. Su padre tenía un próspero negocio cercano a Palacio Nacional y en ocasiones compraba viejos caserones coloniales que valían más por su terreno que por su arquitectura. A la edad de 12 años, ya apuntaba en un libro de contabilidad sus inversiones en bonos, y se mostraba claramente favorable al interés compuesto. ingeniero civil de profesión, cursó estudios en la Universidad Nacional Autónoma de México, donde impartió la cátedra de Álgebra y Programación Lineal. Con su herencia construyó un edificio de varios pisos donde él vivió en un departamento con su mujer y sus hijos. Extraordinario financiero, empezó a comprar varias fábricas y negocios que él hizo prosperar. Carlos Slim Helú, el empresario mexicano por excelencia, es uno de los hombres más ricos de América Latina y el mayor postor de las telecomunicaciones y del comercio electrónico en México. El presidente del gigante azteca Grupo Carso, presente en casi todos los sectores, impulsa las telecomunicaciones y el desarrollo de Internet en el país. Al igual que su padre, que hizo su fortuna comprando propiedades a bajo precio en el centro de Ciudad de México tras la sangrienta revolución de 1910, Carlos combina la capacidad de conseguir gangas con un sentido del patriotismo. En 1982, cuando la combinación de la caída de los precios del petróleo y el déficit público llevó a la economía mexicana al borde del colapso, comenzó a rescatar a las compañías que después consolidaría en su grupo Carso, el conglomerado industrial más importante de América Latina. La habilidad de Slim de localizar un buen 


Carlos Slim,empresario méxicano.
negocio tampoco se ha restringido a la economía nacional. En un típico movimiento suyo, compró en torno al 3 por ciento de Apple Computer en 1997, justo unos días antes del retorno de Steve Jobs a la compañía informática. Un año después, y tras la introducción del ordenador iMac, la cotización de las acciones de Apple había subido de 17 a 100 dólares. El imperio omnipresente de Carlos Slim, que estableció con mucha destreza y sumo cuidado, lo ha convertido en el hombre más rico de América Latina. Telmex, la empresa de telecomunicaciones controlada por Slim, desveló una alianza con Bell Canada y SBC Communications por valor de 3.500 millones de dólares. La operación agrupa a la empresa de telecomunicaciones más grande de Canadá, una de las operadoras más importantes de los Estados Unidos y a la empresa dominante de México para atacar los mercados inalámbricos y de banda ancha de Internet. A la prensa mexicana le gusta compararlo con Midas, y no es de extrañar. En los diez años que Telmex lleva privatizada, Slim ha pasado de ser el tambaleante monopolio controlado por el Estado, a convertirse en el principal valor de América Latina que cotiza en bolsa. Incluso los mayores críticos de Slim admiten que este misterioso empresario sería un hombre muy rico aunque no contara con su amplia influencia. Slim lleva haciendo dinero desde que era muy pequeño. Los sectores de informática y telecomunicaciones figuran muy arriba en la lista de preferencias de Slim. En Estados Unidos, buscó empresas que atravesaban dificultades, y el buen acierto al elegir le permitió construir un imperio en la vanguardia de lo que denomina “la nueva civilización”. En 1997 adquirió Prodigy, un maltrecho proveedor estadounidense de servicios de Internet, y desde entonces ha lanzado un portal en español junto a Microsoft. Pagó 800 millones de dólares por CompUSA. Sus tres hijos administran el Grupo Carso y su filial financiera, Grupo Inbursa, desde que el padre dejó las riendas en 1998. Sus dos yernos se encargan de las divisiones de móviles y de Internet de Telmex. ‘El Ingeniero’, como se le denomina, continúa a la cabeza de Telmex y todavía se reserva la última palabra en la mayoría de los asuntos. Padre de 6 hijos,Carlos, Marco Antonio, Patrick, Soumaya, Vanessa y Johanna. Tres de los cuales (Carlos, Marco Antonio y Patricio) trabajan en los negocios de su padre. Su esposa Soumaya Domit, falleció el 7 de marzo de 1999. El 10 de septiembre de 2008 compra un 6,4% del The New York Times, por un valor aproximado de $123 millones de dólares y se convierte en el tercer accionista más grande de la compañía, después de la familia Ochs-Sulzberger, quienes han mantenido el control accionario del Times desde 1898, y del fondo de cobertura Harbinger Capital Partners. Según la revista Forbes, su fortuna lo ubicó como el hombre más rico del mundo. En marzo de 2011 la misma revista volvió a situarlo como el más rico del mundo. En un año el magnate incrementó su fortuna en 20.500 millones de dólares hasta situarla en los 74.000 millones.

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